Esta receta de terrina helada me encantó, combina tan bien la acidez de las frambuesas con la crema de turrón y nada mejor que esa crocancia de las almendras y los pistachos. Además este postre tiene un colorido muy bonito. Y lo mejor de todo es que es una terrina que se puede preparar con anticipación, ya que se puede congelar hasta por un mes.
Poner alusaplast (papel film transparente) a un molde de queque (para bizcochos rectangular), debe sobrar por los lados.Moler las frambuesas. Batir las claras a nieve junto a la azúcar en polvo. Mezclar la claras batidas con las frambuesas molidas.
Poner esta mezcla en el fondo del molde preparado. Llevar a congelar mientras se prepara el resto del postre. Picar toscamente el turrón y ponerlo en una olla junto con 200 ml de la crema. Cocinar a fuego bajo, revolviendo constantemente, hasta que el turrón se derrita y se tenga una mezcla cremosa y pegajosa.
Dejar enfriar a temperatura ambiente.Batir el resto de la crema. Envolver la crema batida en la mezcla de turró. Agregar las almendras y los pistachos, revolver hasta integrar bien. Poner esta mezcla de turrón sobre la capa de frambuesas.
Tapar bien el postre y llevar al congelador por toda la noche. Lo mejor es que les puede durar hasta un mes en el congelador. Sacar el postre del congelador, unos 15 minutos antes de servir. Dar vuelta sobre un plato, decorar con almendras y pistachos.
Comentarios de los miembros:
Se ve muy fresco y exquisito, especial para el verano.
Divina
EXCELENTE