En un cazo ponemos a calentar a fuego lento 12 cucharadas de agua, el zumo del limón y el azúcar. Lo vamos removiendo bien hasta que se convierta en un caramelo.
Sacamos el cazo y lo ponemos a enfriar (podemos meterlo en agua helada el fondo) hasta que quede caliente pero no mucho.
Cuando se enfrié lo bastante para no estar hirviendo, solo caliente, metemos los higos tomados por el rabito uno a uno.
Cuando salgan los colocamos en un plato llano creando un circulo. Echándoles por encima el resto del caramelo. Metemos en la nevera hasta que enfríen. Para servir, montamos la nata fría y la colocamos en el centro del círculo de higos.