En un contenedor pequeño poner la levadura, el malto y 100ml de agua. Dejar reposar a temperatura ambiente por 15min.
En un contenedor grande poner el resto de los ingredientes y el preparado de la levadura y amalgamar todo, no es necesario (esto me encanta) el amasar tanto, bastan máximo 3-4min o hasta que los ingredientes estén muy bien integrados, debe quedar una masa elástica.
Dejar reposar 3hrs en un lugar tibio, por ejemplo dentro el horno apagado, cubierto con un trapo de cocina mojado y con la luz encendida. En verano pueden ser menos horas.
Enharinar la mesa de trabajo y verter la masa, extenderla y doblarla en tres partes, cortar a la mitad, extender cada pieza y doblar de nuevo en tres partes. Hacer dos bolas y dejar reposar las dos piezas de masa por 1hr cubiertas con un paño húmedo encima.
Engrasar con aceite de oliva dos charolas y poner una pieza de masa en cada una. Extender suavemente con las manos y rociar con aceite de oliva y un poco de sal. Dejar reposar por 20-30min.
Mientras tanto calentar el horno a 250°. Hornear las pizzas (una a la vez) por 15min o hasta que veas que han adquirido un color dorado trigo.