Primero de todo, poned a precalentar el horno a 200ºC. Si tenéis ventilador, mejor. Poned la cebolla en una sartén con un chorrito de aceite a pochar lentamente hasta que esté transparente.
Añadid sal, pimienta negra, el vino de jerez y las hojas de romero, dejadlo cocer por espacio de 10 minutos. Una vez cocido, libro.
Cortad 4 aros de masa de hojaldre, de unos 12-15 cm de diámetro. Debéis tener en cuenta que una vez le pongáis el tomate. Debe de quedar un poco de borde, como si fuera una pizza. Poned los aros en la bandeja de horno, encima de un silpat o papel sulfurizado. Pellizcar cada círculo de hojaldre, por todo el centro, evitando el borde, para que no se hinche al hornearlo.
Aparte, cortar en cuatro tomate más amplia. Pintadlo con tomate y ponedle la albahaca picada, sal y pimienta negra.
Poned en el centro de cada aro la cebolla confitada que habíamos reservado previamente.
También reinihttp://www.ptitchef.com/upload_data/tmp/fdr-20150313-1196530-4ciar el queso cortado en cubos pequeños.
Por último, poner el tomate en la parte superior de cada pastel y dejar parmesano rallado