Calabacines : En una sarten echamos aceite y añadimos la cebolla y el pimiento en brunoisse y lo dejamos dorar bien. Partimos los calabacines a la mitad y cada una de las barquitas las vaciamos con ayuda de un boleador. Reservamos.
Cuando el sofrito este hecho añadimos el calabacin y dejamos que se poche bien, salamos. Añadimos las salchichas en rodajas y dejamos que se hagan bien a fuego suave.
Añadimos la salsa de tomate y removemos todo bien, hasta que tengamos una pastita. Ponemos en una fuente de horno las barquitas de calabacín, las rociamos con aceite y con un poco de molinillo de sal de hierbas (mercadona), rellenamos con la preparación anterior.
Salsa de queso cheddar : Ponemos la nata en un cazo a fuego suave y añadimos la crema de queso, removemos bien con un batidor, salpimentamos. Desleimos la maicena en un pcoo de leche o nata y se la añadimos y removemos hasta tener una salsita espesita pero ligera.
Echamos la salsa por encima de los calabacines y el queso rallado. Metemos al horno a 180 unos 12-15 minutos. Ponemos a gratinar unos 5 minutos o hasta que este doradito y servimos bien caliente.