Hoy os diré, la diferencia entre Jaleas y Mermeladas, hay muchas opiniones, los términos resultan muchas veces confusos. Los libros de cocina no se ponen de acuerdo, en cuales son las diferencias entre unas y otras, ante mi duda, busqué información en Internet y encontré lo siguiente:
Hoy os diré, la diferencia entre Jaleas y Mermeladas, hay muchas opiniones, los términos resultan muchas veces confusos. Los libros de cocina no se ponen de acuerdo, en cuales son las diferencias entre unas y otras, ante mi duda, busqué información en Internet y encontré lo siguiente: Mientras que el origen preciso de las frutas preservadas aún es objeto de debate histórico, es sabido que la elaboración de las jaleas probablemente comenzo hace muchos siglos atrás en Oriente Medio. Los árabes lo habían traído de los países del Sureste Asiático y del entorno de Nueva Guinea, donde la caña de azúcar crecía de forma natural, para cultivarla en sus países de origen y posteriormente en España y Portugal. Se cree que llego a América en el siglo XVII, los recién llegados se apresuraron a elaborar jaleas y mermeladas, fue en Estados Unidos donde se descubrió que la pecticina extraída de las manzanas sirve para espesar las jaleas. Las jaleas y mermeladas, se elaboran con cientos de sabores y variedades desde la uva hasta exóticas mermelada de chocolate, ( como me encantaría hacer una de estas mermeladas exóticas de chocolate ummmmmm) pasando por la delicadas jaleas de flores. Cada cucharada de jalea contiene alrededor de 48 calorías aunque las podemos encontrar bajas en calorías además de contener 0 grasas. A diferencia de la mermelada, la jalea no contiene partículas sólidas y puede tener una consistencia más firme, pudiendo cortarla en trozos. Después de este resumen, la explicación, que he encontrado, es que la jalea son conservas transparentes que se obtienen hirviendo jugo de fruta sin pulpa con cascara y semilla concentrándolo, después, de incorporarles el azúcar. Es fundamental que la fruta contenga pecticina sustancia natural que hace que la jalea tome su consistencia. La jalea se debe cocinar a fuego fuerte sin revolver y sin tapar. La mermelada, es el producto preparado por cocción de frutas enteras, troceadas, tamizadas, trituradas, incluso, hasta con la piel que se les ha agregado azúcar, para conseguir, un producto semiliquido o espeso hay entran, también, las confituras. la consistencia es aún más carnosa e irregular ya que las dos llevan trocitos de frutas, se puede hacer de cualquier fruta, teniendo en cuenta que llevan azúcar y fruta a partes iguales.
En uno de mis libros de cocina, encontré, esta receta, de como hacer la jalea de grosellas, no se si me llego a cuajar, era la primera vez que me ponía a investigar el tema de la jalea, pero mi resultado me gusto y más tarde lo utilice con otra receta que le venia genial, es decir las tortitas de patatas.
Lo primero que hice, fue quitar el rabito verde de las grosellas, introduciéndolas en un cazo, acercándolas al fuego para que se deshagan, una vez que soltaron el jugo las pase por el chino puesto sobre un recipiente. Una vez recogido todo el jugo, lo pesé poniendo la misma cantidad de azúcar y lo introducía en un cazo dejándolo cocer fuerte casi una hora, exactamente 40 minutos.
Lo pasé a un recipiente y lo deje cuajar. Mas tarde lo deje enfriar en el frigorífico. Como os he dicho no se si conseguí hacer bien la jalea, aquí tenéis el resultado.
Ahora vamos a las tortitas, lavamos las patatas bajo el chorro de agua con un cepillo, las ponemos a hervir, añadiendo al agua una pizca de sal y las dejaremos hasta que pinchándolas estén cocidas.
Una vez que podamos pelar las patatas las trituramos con la ayuda de un tenedor, batimos los huevos y añadimos la harina o en mi caso maizena, y un poquito de sal.
Precalentamos el horno a 100º para mantener calientes las tortitas a medida que se vayan haciendo. Calentamos 1 cucharada de mantequilla o manteca en una sartén pequeña y echamos 3 o 4 cucharadas de la masa de patata, aplastandola con una espumadera o con el dorso de una cuchara. Doramos la tortita unos 3 minutos por cada lado. A medida que vamos haciendo las tortitas las vamos reservando en la bandeja del horno que tenemos ya encendido, para que no se nos enfríen.
Podemos prepararlas también con una salsa de queso roquefor, con compota de manzana, con azúcar y canela espolvoreadas, con melaza de remolacha, en fin con lo que más os guste, yo optaré la próxima vez, con una compota de manzanas. Espero que os guste.