Introducir los ingredientes en el orden indicado en la cubeta de la panificadora. La sal no debe entrar en contacto con la levadura, de otro modo el pan no levaría bien.
Programar el amasado que no debe exceder de 15 min. Dejar reposar la masa durante 1h 30 min dentro de la máquin
Enharinar un papel de horno muy grande y volcar la masa sobre este (la masa debe estar muy blanda y pegajosa). Darle forma de rectángulo sin esmerarse mucho. Levantar el papel por sus lados más largos como si fuese un "papillote", yo lo sujeté con una pinza. De este modo evitamos que la masa se desparrame. Reposar otra media hora.
Precalentar el horno a 220º. Abrir el "papillote", e introducir en el horno durante unos 20 min o hasta que la corteza esté dorada y al golpear su base suene a hueco.
Conservar envuelto en un paño de tela que no haya sido lavado con jabón ni suavizante, sino el pan acabará teniendo gusto a estos productos. Yo suelo tener unos paños exclusivamente para eso.