Mezclamos todos los ingredientes de las albóndigas, formamos bolitas y las doramos en un poco de aceite. Las albóndigas, una vez doradas las reservamos en un papel absorvente.
La salsa la vamos preparando mientras se doran las albóndigas, dorando la cebolla roja, muy, pero que muy picadita en el aceite.
Cuando tenga colorcito dorado añadimos la cebolla frita, la harina y removemos todo bien para dorar un poco la harina. Añadimos el agua, el vino, la pastilla y el vinagre. Removemos bien y dejamos que hierva.
Cuando levante el hervor añadimos las albóndigas que teníamos reservadas y cocinamos a fuego medio-bajo hasta que tenga la salsa la consistencia que nos guste cuidado que espesa bastante.
Comentarios de los miembros:
Yo tambien soy fanatico de la cebolla frita. FANTASTICA