Se pone el arroz en una cazuela y se cubre con agua. Por cada 2,5 partes de arroz, se echan 3 partes de agua. En este caso serían 300 ml de agua.
Añadimos un poco de sal y las hojas de lima kaffir. Subimos el fuego y en el momento que empiece a hervir, cubrimos la cazuela, bajamos el fuego al mínimo y lo dejamos 15/20 minutos.
Pasado ese tiempo, retiramos del fuego y lo dejamos reposar otros 5 minutos sin destapar.
Mientras tanto en una sartén echamos una cucharada de aceite y sofreímos la rama de hierba de limón, picada en brunoise. No tiene que tostarse.
Añadimos los guisantes, salamos y los rehogamos durante 7/8 minutos.
Sacamos el arroz de la cazuela, lo soltamos con la ayuda de un tenedor y lo mezclamos con los guisantes. Lo servimos caliente.