Añadimos el vino en un cazo y a fuego fuerte le damos un hervor para que se evapore el alcohol.
Pasados un par de minutos, añadimos la salsa de soja, la miel y media cucharadita de romero seco, mezclamos bien y dejamos reducir hasta conseguir una textura similar a la del caramelo.
Ahora en una sartén añadimos un chorrito de aceite y lo calentamos a fuego fuerte, añadimos las chuletillas, le añadimos sal al gusto y las freímos hasta que estén bien doradas. Si no os entran todas las chuletillas en la sartén las freís en varias tandas. Cuando ya están fritas a nuestro gusto, las retiramos a un plato y freímos el resto de chuletillas.
Cuando ya hemos frito todas las chuletillas las devolvemos a la sartén, y le añadimos el glaseado, damos unas vueltas para que las chuletillas se impregnen bien del glaseado y ya estarían listas!!