Ponemos en una cazuela abundante agua con sal a hervir, cuando empiece a hervir añadimos las láminas de lasaña de una en una. Removemos para que no se peguen. Nos fijaremos en las indicaciones del fabricante para saber el tiempo de cocción.
Ahora con la ayuda de un papel de cocina vamos untar un poco de mantequilla en el recipiente donde vamos a montar la lasaña. Este paso es opcional pero ayuda a que no se quede pegada en el recipiente. También en vez de untar mantequilla podéis poner salsa de tomate o una fina capa de bechamel en la base del recipiente.
Mientras se cuecen las láminas de lasaña vamos a cortar las verduras en trocitos pequeños. Cogemos un par de cebolletas le quitamos los extremos y la primera capa y las troceamos finamente. Una vez picada la reservamos en un recipiente.
Ahora cogemos medio pimiento rojo, lo partimos por la mitad, le quitamos la parte blanca y las semillas, hacemos unas tiras y después hacemos trocitos pequeños. Reservamos junto con la cebolleta.
Ahora cogemos una zanahoria, la pelamos y la troceamos en pedazos pequeños. La ponemos junto con el pimiento y la cebolleta.
Ahora añadimos un chorrito de aceite en una sartén y añadimos las verduras troceadas, le ponemos sal al gusto, pizca de pimienta y vamos pochando las verduras a fuego medio-bajo.
Mientras se va pochando la verdura, refrescamos con agua fría las láminas de lasaña y las vamos poniendo sobre un paño limpio y con la ayuda de un papel de cocina las vamos secando.
Una vez secas, las vamos colocando en el recipiente donde montaremos la lasaña. Si sobra por algún lado, cortamos el excedente. Ahora ponemos queso en lonchas. Yo voy a usar 2 tipos de queso en lonchas, vosotros utilizar el que más os guste.
Una vez que la verdura ya está pochada, añadimos la carne picada y la vamos desmenuzando. Dejamos que se vaya cocinando a fuego medio.
Cuando ya está bien cocinada la carne, añadimos salsa de tomate al gusto y removemos.
Ahora nos ponemos con la bechamel, para ello, añadimos 2 cucharadas de mantequilla y dejamos que se derrita, después añadimos 2 cucharadas de harina. Removemos bien durante 1 minuto aproximadamente y a continuación vamos añadiendo leche poco a poco. Vamos removiendo sin parar para que no se nos formen grumos. Iremos añadiendo leche a medida que lo vayamos necesitando. Y no nos olvidemos de añadirle sal.
Esto es un toque personal, pero a mi me gusta añadir un poco de queso rallado a la bechamel, así que le añado un puñadito de que queso rallado y sigo removiendo.
Ahora toca montar la lasaña. Añadimos una capa de carne procurando que quede lo más repartida posible. Ahora encima de la capa de carne añadimos una capa de bechamel repartiéndola lo mejor posible.
Ahora volvemos a poner láminas de lasaña, lonchas de queso, y volvemos a poner capas de carne y de bechamel. Repetiremos la operación tantas veces como queramos.
En la última capa, añadimos queso rallado, esto hará que a la hora de gratinar la lasaña esta tenga un bonito color dorado.
Yo la voy a meter unas horitas a la nevera, esto hará que la lasaña tenga más consistencia.
Pasadas unas horas, ya solo queda gratinar la lasaña. Podéis gratinar la lasaña entera o bien podéis partir una ración y gratinarla y el resto podéis congelarla en el congelador, que es lo que yo voy a hacer.
Me alegro haberte sido de ayuda!!!