Se hacen unos cortes en el lomo sin llegar a cortarlo.
En una cacerola o barreño, etc se ponen las especias, los ajos machacados, el zumo del limón y la naranja, sus pieles, el vinagre y el agua.
Se deja en el adobo unos tres días en un sitio fresco. Se le da vueltas dos veces al día. Pasado este tiempo se saca del adobo y se seca, dejándole una noche oreándolo al fresco.
Se cortan los trozos del todo y se fríen en abundante aceite de oliva virgen extra a fuego medio-lento y no demasiado para que no se queden muy secos por dentro.
Se cubren los trozos con el aceite de freírlos y se conservan durante meses.
Comentarios de los miembros:
Este lomo es genial y te sacarà de màs de un apuro cuando tengas invitados para comer ,ya que es un buen entrante.