Pelar las patatas y ponerlas a hervir en agua abundante con sal.
Mientras, en una sartén sofreír el ajo, cebolla, zanahoria y apio, todo troceado muy pequeño.
Cuando esté dorado añadir la carne y dejar que se haga unos minutos, agregar el romero y el vino. Subir el fuego para que evapore y agregar el tomate frito. Salpimentar.
Dar unas vueltas e incorporar el agua o el caldo. Cuando haya hervido y evaporado el liquido apartarlo del fuego.
Precalentar el horno a 200º.
Una vez cocidas las patatas escurrirlas, aplastarlas con un tenedor o cuchara, añadiendo al mismo tiempo la mantequilla, la leche caliente y sal y pimienta molida.
En una fuente de horno colocar la carne y encima extender el puré de patatas, rallar un poco de queso por encima y meterlo a gratinar en el horno. Cuando esté ligeramente dorado, listo para servir.
Comentarios de los miembros:
Uno de mis platos favoritos
Me encanta esta receta, me recuerda cuando mis hijas eran pequeñas y no querían comer puré, solo se lo comían si se lo preparaba de ésta manera.