Colocar una camareta a un metro de los carbones del fogón; luego el o los pescados a moquiar.
Se ponen encima de la camareta y se tapan con hojas o bejucos. Se deja durante tres horas, de acuerdo a la cantidad de pescado.
Se moquea con el humo que sale de los carbones, avivando de vez en cuando la candela con la grasa del pescado que cae sobre ellos.
Se consume preferiblemente caliente, colocándolo en una bandeja. Se le retira todo el cuero con la escama, después se le agrega sal al gusto y se acompaña con casabe.