Estiramos la masa de pizza y la ponemos sobre un recipiente apto para horno que tenga más o menos el tamaño de la loncha de queso provolone, probablemente un simple plato hondo te valdrá
Ponemos el queso sobre la masa y por encima unas tiritas de jamón o bacon. Espolvoreamos con orégano y horneamos a 200º durante unos 12 minutos. Lista para degustar!