En casa nos gusta mucho la mezcla dulce-salado así que tuve claro que los combinaría con queso de cabra. Pensé en hacer unos muffins salados pero al final, me decidí por esta quiche; fácil y rápida.
Dejamos descongelar la masa quebrada a temperatura ambiente y cuando la tengamos lista, la espolvoreamos levemente con harina y la estiramos un poco con un rodillo. Cubrimos con ella el molde en el que vamos a preparar la quiche, presionando bien para que se quede bien pegada a los bordes y pinchamos toda la superficie y los laterales con un tenedor.
De esta manera, no subirá al cocerla en el horno. Metemos en el horno a 200º durante unos 10 minutos, con calor arriba y abajo hasta que se nos empiece a dorar y mientras, preparamos el relleno.
Cortamos el queso de cabra en rodajas no muy finas y los higos en dos mitades. Batimos los huevos y les añadimos la nata y un poco de pimienta. Mezclamos bien. Vertemos ésta mezcla sobre la base, que ya tendremos horneada y vamos colocando por encima los trozos de queso y los de higo.
(Yo esta vez lo hice en trozos grandes para que se viesen y quedase mas decorativo pero también nos quedará muy bien si cortamos tanto el queso como los higos en trocitos pequeños y los repartimos por todo el relleno)
Horneamos a 180º hasta que la superficie esté dorada. Podemos tomarla caliente, templada o fria.
Comentarios de los miembros:
¿Podría hacerse con higos frescos? No tengo acceso a estos confitados. Gracias
La voy a probar!!
MUY BUENA