Si disfrutas de las recetas que combinan el dulce y el salado prepárate para deleitarte con estos deliciosos saquitos súper crujientes de masa filo. Para el relleno vamos a utilizar champiñones, queso brie y pera. Un entrante perfecto, fácil y rápido con el que sorprender a tus invitados. ;-)
Limpiar y trocear los champiñones en dados más o menos regulares. En una sartén, con un poco de oliva, saltear los champiñones durante unos minutos.
Precalentar el horno a 180°C. Mientras, lavar, pelar, descorazonar y cortar las peras en daditos. Trocear igualmente el queso brie.
Una vez que los champiñones estén dorados, añadir las peras y el queso a la sartén. Cocinar a fuego lento durante unos minutos mientras movemos de vez en cuando para que no se nos pegue. Salpimentar al gusto.
Para hacer los saquitos: superponer 2 hojas de masa brick, una encima de la otra. Colocar 4 cucharadas del relleno en el centro. Plegar las hojas de pasta brick para formar el saquito. Luego sujeta el extremo con un palillo mondadientes. Repetir la operación con el resto de los ingredientes hasta hacer 4 saquitos.
Colocar con cuidado los 4 saquitos en una bandeja de horno en la que habremos puesto papel sulfurizado. Hornear durante 10 minutos o hasta que obtengan un color dorado.
Con la ayuda de una espátula, retira con cuidado las saquitos de la bandeja de horno y colócalas en el plato en el que vayas a servir. Y listo!
Puedes pintar las 2 hojas de filo con un poco de aceite de oliva o mantequilla fundida. Además de sabor y color, conseguiremos que las hojas sean más maleables y flexibles.
Utiliza un par de hojas por cada saquito. Así evitaremos que el relleno se escape durante la cocción.
Gracias a ti por disfrutar de las recetas que compartimos en Petitchef! :)