Empezamos echando un chorrito de aceite en una cazuela y dejamos que se vaya calentando a fuego medio.
Mientras tanto, vamos a trocear un diente de ajo en trocitos pequeños y cuando el aceite ha cogido temperatura, añadimos el ajo picado. Dejaremos que se vaya dorando a fuego medio.
Mientras se va dorando el ajo, vamos a trocear un pimiento verde en cuadraditos ni muy grandes ni muy pequeños. Queremos que se vean los trozos en el marmitako.
Ahora cogemos una cebolleta y picamos en trocitos pequeños.
Cuando los ajos han empezado a coger color, añadimos a la cazuela el pimiento verde y la cebolleta. Le ponemos una pizca de sal. Removemos y dejamos que se poche a fuego medio.
Cuando ya esta media pochado, añadimos dos cucharadas de tomate triturado. Mezclamos bien.
Y también añadimos una cucharadita de pulpa de pimiento choricero. Y dejamos que se siga pochando.
Mientras tanto, vamos a ir troceando las patatas. Para ello, pelamos y chascamos las patatas. Para los que no sepan que es chascar, es meter el cuchillo en la patata sin llegar a hacer el corte completo, es decir, metemos un poco el cuchillo en la patata y luego giramos el cuchillo para que se rompa la patata. Con esto conseguiremos que la patata suelte más almidón y el caldo del marmitako nos quede más gordito.
Cuando ya tenemos todas las patatas troceadas, las añadimos a la cazuela. Mezclamos bien.
Ahora le voy a añadir un caldo de pescado, si no tenéis caldo de pescado, le podéis añadir agua sin problema. Lo único que con el caldo nos quedará un marmitako más sabroso. Cubrimos las patatas con el caldo, le ponemos una hojita de laurel y le ponemos sal al gusto. Removemos bien, le ponemos la tapa a la cazuela y dejamos que se cocine a fuego medio durante unos 20 o 25 minutos. Dependerá del tamaño que hayáis cortado las patatas.
Mientras se van cocinando las patatas vamos a trocear el bonito. Yo tengo una rodaja de bonito a la que le voy a quitar las partes más oscuras. Y después lo partimos en trozos ni muy grandes ni muy pequeños, más o menos en trozos de bocado. Añadimos sal al gusto al bonito.
Y cuando ya han pasado unos 25 minutos y las patatas están blanditas, apagamos el fuego a la cazuela y añadimos los trozos de bonito. Removemos bien para repartir el bonito por la cazuela, le ponemos la tapa y con el calor residual de la cazuela los trozos de bonito se acabarán cocinando. Dejamos un par de minutos con la tapa puesta y listo!!