Los noodles o fideos chinos se han hecho muy populares en los últimos años, sobre todo como plato precocinado que se puede encontrar en cualquier supermercado, pero en su versión casera, además de sencillos y rápidos de preparar, son deliciosos y sin duda mucho más sanos.
El nian gao o pastel de arroz, es una masa de arroz glutinoso que queda chiclosa y blanda al cocer y que se utiliza en recetas típicas del año nuevo chino, tanto dulces como saladas, pero a mi de este plato lo que me gusta es la forma de prepararlo, así que como no tenía esta pasta la sustituí por noodles y quedaron igual de ricos.
Empezamos por lavar y cortar las verduras en trozos de tamaño mediano, no queremos que se deshagan y desaparezcan al sofreírlas, si no que tengan presencia en el plato y queden más bien al dente, de la cebolleta incluir la parte verde también, reservar.
Cortar el pollo en tiras, más o menos del mismo tamaño que las verduras, si tenéis algún resto de pollo asado utilizarlo sin miedo en esta receta que quedará estupendo, eso sí, saltaros el paso de freírlo que no será necesario.
Preparar la salsa mezclando en un bol soja, vinagre de arroz, aceite de sésamo, pimienta blanca, condimento de pollo y azúcar, las cantidades son orientativas ya que depende de cuanta salsa os guste ponerle a la pasta, aunque con las que he indicado es suficiente para 250g de noodles, en esta receta los fideos quedan bien embadurnados y sabrosos, pero sin nadar en salsa.
Poner abundante agua en una olla a fuego fuerte, cuando rompa a hervir echar los fideos y bajar el fuego, dejar cocer entre 3 y 5 minutos removiendo un par de veces con cuidado, y escurrir reservando parte del agua de cocción.
Poner un wok o sartén honda a fuego alto y cuando esté bien caliente agregar aceite de oliva suficiente para cubrir el fondo, freír el pollo y reservar, saltear todas las verduras con una pizca de sal, excepto el pak choy, hasta que estén al dente y reservar.
Ahora mezclamos en el wok los noodles con el pollo y a continuación con las verduras, regamos con la salsa que tenemos preparada y un chorrito del agua de cocción reservada, añadimos el pak choy y removemos con cuidado para no romper la pasta, cocinar un par de minutos y ya está lista para servir.
Como veis es una receta fácil y rápida de preparar, ligera y muy sabrosa, además es apta para celiacos ya que la pasta de arroz no tiene gluten, pero hay que tener cuidado y moderar su consumo si tenemos diabetes, ya que aunque es más baja en sodio, calorías, colesterol y grasas que la pasta tradicional, sigue siendo rica en carbohidratos y tiene un índice glucémico incluso superior.
En cuanto a los fideos el tiempo de cocción puede variar en base al tipo que uséis y a su grosor, por eso lo mejor es seguir las indicaciones del paquete.