Aquí tengo unos contramuslos de pollo deshuesados y sin piel, los troceamos en trozos que sean más o menos de bocado. Cuando ya tenemos todo el pollo troceado, le añadimos sal al gusto y lo pasamos por harina, intentando que todo el pollo se impregne bien de la harina.
Ahora en una cazuela, añadimos aceite para que cubra el fondo de la cazuela y lo calentamos a fuego medio. Cuando el aceite ha cogido temperatura, añadimos los trozos de pollo y dejamos que se vaya dorando.
Mientras el pollo se dora, vamos a trocear las verduras. Cogemos un par de dientes de ajo y los troceamos en pedazos pequeños, y a medida que vamos troceando las verduras las vamos dejando en un plato. Ahora pelamos 3 zanahorias y las cortamos en rodajas, más o menos de este tamaño. Ahora cogemos una cebolla o cebolleta y la picamos en trocitos pequeños.
Cuando el pollo ya ha cogido color, lo reservamos en un plato, y en esa misma cazuela, sin limpiarla ni nada, añadimos un chorrito de aceite e incorporamos las verduras troceadas, añadimos sal y pimienta al gusto y dejamos que se vaya pochando a fuego medio.
Ahora, mientras se va pochando la verdura, vamos a cortar unos champiñones en láminas.
Cuando la verdura ya está pochada, añadimos los champiñones y dejamos que se cocinen unos 5 minutos.
Después añadimos una cucharada de salsa de soja, 4 cucharadas de miel y un vaso de agua y mezclamos todo bien. A continuación añadimos el pollo que teníamos reservado y si ha soltado algo de jugo pues también se lo añadimos. Mezclamos, le ponemos la tapa a la cazuela y dejamos que se cocine unos 20 minutos.