Pela las patatas y córtalas en bastones. Enjuágalas bien y fríelas en aceite.
Limpia la lechuga, enjuágala, sécala y sírvela con el apio. Haz para ella una vinagreta de 3 partes de aceite por una de módena y sal.
Para el samón. Calienta un poco de aceite en una sartén y, cuando esté caliente, ponlo por el lado de la piel. Deja unos 10 minutos para que la piel se quede crujiente.
Controla que no se queme. Dale la vuelta y mantén unos minutos dependiendo del grosor. Mantén hasta que toques y no esté muy blando.
Sala el salmón y sirve con la lechuga aliñada y las patatas crujientes.
Comentarios de los miembros:
El salmón queda con sabor a pescado,lo cual quisiera no se presentara.
Nada nuevo
Es uns receta , sabrosa que aporta beneficios al bienestar de las personas .
Lo he probado, es fácil de hacer y está bunísimo.
Gracias
Muy rico y facil de´preparar
Riquisimo..
Rico rico de verdad.
Tiene que estar delicioso,