Es una salsa para condimentar un plato de pasta o comer sencillamente las salchichas.
Poner en una cazuela de barro, 3 cucharadas de aceite, el diente de ajo entero, la zanahoria cortada a juliana y la cebolla picada y un poco de guindilla.
Cuando todo esté dorado, incorporar las longanizas, pinchar y añadir un poco de vino blanco. Dejar evaporar.
Incorporar el tomate, las hojas de laurel, salar y con la tapadera puesta, cocinar 45-50 minutos a fuego medio.