En un mortero machacais el ajo junto con el tomillo y el orégano. Añadis aceite, aproximadamente dos dedos de profundidad del mortero y revolveis bien.
Luego poneis las aceitunas negras sin llegar a llenar todo el mortero, para poder revolverlas bien. Las moveis para que se impregnen del aliño y las conservais en la nevera.
En lo que tardeis en sacarlas para tomarlas abrid el frigo de vez en cuando y removedlas un poco, para que todas vayan cogiendo sabor.
Según las vayais comiendo podeis ir rellenando con aceitunas, que el mismo aliño se puede reutilizar para todas las de un mismo bote.
Cuando relleneis procurad dejar las nuevas en la parte de abajo, así les damos más tiempo a coger sabor.
Comentarios de los miembros:
Sencilla y sin acidez
Muy ricas, se le puede agregar un poco de laurel