Filetear la berenjena a lo largo en lonjas muy finas, Cortar luego las lonjas en tiras finas y esparcirlas en un mesón. Espolvorear la berenjena con toda la sal.
En este momento de la preparación parece muchísima berenjena, pero una vez deshidratada resultará poca.
Colocar la berenjena salada en un colador, sobre la berenjena un plato y sobre el plato un peso.
Casi inmediatamente la berenjena comenzará a botar su agua. De vez en cuando revolver la berenjena y repetir la operación.
Al cabo de un par de horas, terminar de exprimirla con las manos y extenderla bien esparcida sobre una bandeja para horno con una plancha de silicona.
Colocar la bandeja en un horno a fuego muy bajo 150 ° por aproximadamente una hora, cuidando de remover cada 15 minutos la berenjena porque tiende a pegarse en la bandeja.
Una vez que la berenjena esté fría, mezclarla con el ajo y el perejil. Colocar la mezcla en un envase y cubrirla con 1 taza de aceite de oliva. Comer al día siguiente.
Comentarios de los miembros:
Muy buena y práctica la receta.
MUY BUENA EXPLICACIÓN PARA LOS QUE SE INTERESAN EN LA COCINA SIN COMPLICACIONES