Con este calor en casa casi nos alimentamos solo de ensaladas, por no andar sudando la gota en la cocina y porque apetecen cosas frescas, por eso se han convertido en plato único para comer o cenar y procuramos que sean equilibradas y con mucho alimento, esta es una de las que hemos probado este verano y hemos repetido ya más de una vez, es saciante, sana y también muy importante está rica rica.
Lo primero que haremos será cocer los huevos para que se enfríen mientras preparamos el resto de la ensalada, y también preparar la vinagreta para que macere un poco mientras tanto, para ello vamos a empezar por poner en un cuenco la sal y el jengibre recién rallado, lo mezclamos con el zumo de media naranja hasta que la sal se disuelva y por último ponemos el vinagre y el aove, en la cantidad que queráis pero siempre guardando la proporción del doble de aceite que de vinagre.
Vamos cortando el resto de ingredientes después de lavarlos bien para añadírselos a las espinacas, los champiñones en láminas, los tomates a la mitad y la cebolla en juliana,el queso en taquitos y la media naranja restante en trozos pequeños después de haberle retirado la piel, los filetes de trucha los cortamos en tiras, y los huevos por la mitad, no os olvidéis de poner las nueces.
Revolvemos todo bien y aliñamos con la vinagreta de naranja, podéis presentarla en una ensaladera o en raciones individuales, en cuyo caso mejor servir la vinagreta aparte para que cada uno se ponga la cantidad que quiera.
Por culpa del covid lo de comer de un mismo plato entre varios no es nada recomendable, y con las ensaladas suele así, de modo que por higiene y precaución a partir de ahora deberemos acostumbrarnos a la segunda opción, o sea servir raciones individuales.