Sofrío la cebolla en el aceite, con un poquito de sal para que sude el agua y a fuego lento. Cuando está doradita, añado el vino y subo el fuego para que evapore el alcohol.
Cuando la cebolla esté transparente, añado la cucharada de caldo concentrado de verduras y el tomate. Remuevo bien. Cuando alcance la temperatura de ebullición, tapo la cacerola y bajo el fuego al mínimo y lo dejo cocer entre 50 y 60 minutos. Echo la sal y corrijo la acidez del tomate, si es necesario, con una pizca de azúcar.
Mientras, corto la carne y el chorizo a cuchillo, en daditos pequeños.
En una sartén, con un mínimo de aceite, lo justo para que no se pegue, sofrío toda la carne. Le echo sal y pimienta y la dejo sofreír por espacio de unos 20/30 minutos.
Cuando esté la carne en su punto, la añado a la cazuela del tomate con cuidado de que no se vierta la grasa del chorizo que suele quedarse en el fondo de la sartén.
Esta receta sirve para acompañar pasta, o también para hacer un arroz a la cubana. Se congela perfectamente, por lo que acostumbro a cocinar de sobras y tener la salsa lista para añadir a la pasta recién cocida.
Comentarios de los miembros:
Hoy la he hecho para pasta y me a gustado por su sencillez a la hora de elaborarla y sabor!
Esta receta me ha cautivado del todo. Hoy será en mi mesa "EL PLATO DE ORO" !!!!!
Excelente!!!!!!!!!!!!!!!y muy bena
ES UNA SALSA MUY DELICIOSA, Y TIENE DIVERSSS UTILIDADES