Para hacer la masa de harina para los gurullos ponemos harina en forma de volcán, añadimos agua y un poco de aceite y amasamos.
Cogemos un poco de masa, hacemos un cordón y vamos formando, con los dedos, como granitos de arroz, poniéndolos en un paño y dejándolos secar durante 24 horas.
En una olla, cocemos los garbanzos, las judías blancas, los caldos y los hinojos en agua. En una sartén, freímos el conejo o la liebre en trozos y los añadimos a la olla, con las semillas ya guisadas.
Hacemos un sofrito en el aceite de freír el conejo, con pimiento verde, cebolla y tomate, todo en trozos pequeños y lo añadimos a la olla. En el mortero, majamos pimiento rojo seco, frito previamente, ajos, comino y pimienta y añadimos el majado a la olla.
Por último, añadimos los gurullos para que se cocine todo junto, ponemos al punto deseado de sal y listo para comer.