Encender el horno a 180ºC. Untar el solomillo con la mostaza. Calentar el aceite en una sartén antiadherente y dorar el solomillo. Pasarlo a una bandeja de horno.
Calentar el caldo en la misma sartén donde se ha dorado la carne y llevar a ebullición. Al primer hervor, apartar del fuego y verter el caldo sobre la carne. Agregar a la bandeja los orejones y las manzanas enteras y sin corazón.
Hornear todo a 180ºC durante 35 minutos. Cuando las manzanas estén blandas, retirarlas del horno, pelarlas y aplastarla para hacer un puré.
Servir el solomillo cortado en rodajas con el jugo de la cocción, los orejones y el puré de manzanas.