El tiramisú es uno de esos postres que vemos replicados una y mil veces. Esto se debe, en gran parte a la sencillez de su elaboración. Pero no nos engañemos, hay un mundo y entre un tiramisú mediocre de uno bueno. Parte de la clave radica en la calidad de los ingredientes pero otra, bastante importante, está en los pequeños detalles como cualquier receta de repostería que se precie.
Muchos de los consejos, trucos y astucias que vamos a nombrar seguro que ya los conoces y te resulten redundantes pero posiblemente otros te den el quid para mejorar tu postre y hacerlo memorable.
Consideraciones a tener en cuenta con los ingredientes:
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Tiramisú de frambuesas Este postre tiene pocos ingredientes así que la calidad de los mismos va a determinar en gran medida el resultado obtenido.
Huevos:
En esta elaboración se utilizan huevos sin cocinar y esto requiere de mucha atención para evitar infecciones alimentarias. Siempre, tenemos que utilizar huevos frescos y cumplir con unas estrictas normas de higiene a la hora de manipularlos. No dejes ninguna de las elaboraciones con huevo, que utilicemos en esta elaboración más de 10 minutos a temperatura ambiente. Si entre en un paso y otro vas a tardar más, te recomendamos ir refrigerando la elaboración. Si aún así no te fías de consumir huevos sin cocinar te aconsejamos usar claras y yemas pasteurizadas. Otra opción, es sustituir el huevo por nata montada y listo! Esto último es lo que hicimos precisamente en este Tronco de tiramisú sin huevo.
Bizcochos soletilla:
Para hacer tiramisú vamos a utilizar una especie de galleta seca y dulce que en España se conocen como Bizcochos de soletilla o melindros, biscotti savoiardi en Italia, lady fingers en Inglaterra y vainillas en Argentina. Al hacer uso de estos bizcochitos tenemos que tener dos consideraciones en cuenta:
- Humedecerlos correctamente. Tendremos que embeber estos bizcochos en café (si se trata de la receta de tiramisú clásico) pero tenemos que hacerlo en el punto óptimo. Si los empapamos demasiado nos resultará un postre aguado. Si por el contrario, no lo hacemos lo suficiente privaremos a este postre de la untuosidad cuasi sedosa que lo caracteriza.
- La segunda recomendación, que nos llega desde la academia del gusto, es colocar la cara azucarada siempre mirando hacia abajo.
- Puedes utilizar bizcochos industriales pero utilizar bizcochos de soletilla caseros suma puntos! :)
Mascarpone: mejor frío, de buena calidad y, a la hora de incorporarlo, hacerlo en tandas.
Consideraciones a tener durante la elaboración:
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Vasitos de tiramisú con speculoos De una parte, mezcla las yemas + azúcar hasta conseguir una crema blanquecina y ligeramente espumosa. Este paso es recomendable hacerlo manualmente y no con varillas eléctricas. Misterios de la naturaleza no queda igual.
Añadir la mezcla de yemas y azúcar al bol del mascarpone (mejor que el queso esté frío). Hazlo de poco a poco, en pequeñas tandas. Mezcla con una espátula hasta conseguir una mezcla untuosa.
De otra parte, bate las claras a punto de nieve, mejor hacerlo con unas varillas eléctricas. Han de quedar muy firmes. Puedes añadirles una pizca de sal para ayudar a estabilizarlas. Ahora añádelas a las mezcla anterior. Hazlo en pequeñas tandas y es importantísimo amalgamar ambas elaboraciones con una espátula y haciendo movimientos envolventes para que las claras no se bajen. No lo batas!
Montaje: empezar con bizcochos, e ir haciendo capas con bizcochos, crema, bizcocho… siempre tendremos que acabar con la capa de mascarpone y rematar espolvoreando cacao sin azúcar.
Reposo: Importantísimo dejar reposar este postre en el frigorífico un mínimo de 4 horas. Pero lo recomendable es hacerlo durante toda la noche.
Ahora que lo sabes todo sobre el tiramisú, es hora de ponerlo en práctica y de experimentar. La receta de tiramisú clásico es fantástica pues permite hacer declinaciones de lo más diversas. Elige según tus gustos y andiamo!
Experimenta con los sabores:
Si el sabor a café te resulta demasiado fuerte puedes aligerar su sabor añadiendo un chorreoncito de leche. También puede probar a añadirle un chorreoncito de licor de café, brandy, ron o haz un tirmaisú con amaretto; Incluso puedes aromatizar la mezcla de yema y azúcar con las semillas de una vaina de vainilla como hace el chef italiano triestrellado Massimo Botura.
Si te gusta el chocolate prueba a potenciar su sabor, añadiendo una capa extra de chocolate rayado encima de cada capa de crema.
O atrévete con otras frutas u otro sabores!
Experimenta con la presentación:
Puedes servir el tiramisú en vasitos individuales, copas, en forma de tarta redonda o cuadrada, de tronco, en formas rectangulares, de timbal, de cake pops… ¡Las posibilidades, como vemos son enormes!
Comentarios de los miembros:
Yo hago el clásico, pero voy a probar el de fresas
Rico rico
Perfecto!