En primer lugar, cocemos con unas horas de antelación las patatas y los dos tipos de huevos en recipientes diferentes. Una vez cocidos, pelamos y reservamos los huevos.
A continuación, cortamos en pequeños cuadraditos los pimientos, la cebolleta, el pepino pelado y el tomate escalfado y pelado previamente, y lo mezclamos todo en una ensaladera grande.
Pelamos la patata y la cortamos en cuadraditos. Añadimos a la ensaladera procurando que esté a temperatura ambiente.
Mezclamos con cuidado la mitad de la lata de bonito del norte de Conservas Serrats, desmenuzándolo ligeramente, así como las claras de los huevos de gallina cocidos y cortados.
Sazonamos muy poco para no salar demasiado la ensalada.
Después, en un mortero, molemos los cominos con muy poca sal y añadimos el diente de ajo, machacamos bien y añadimos las yemas de huevo.
Machacamos para hacer una pasta y añadimos un poco de agua para poder verter el contenido en un bol metálico.
Con la ayuda de una varilla, vamos ligando la mezcla con el aceite de oliva para formar una salsa con cierta densidad, agregamos el vinagre y mezclamos bien.
Aliñamos con esta salsa la ensalada.
Prensamos la ensalada con aro circular y lo presentamos en un plato.
A continuación, colocamos encima unas láminas de bonito del norte de Conservas Serrats, procurando no romperlas demasiado, y añadimos las anchoas del Cantábrico de Conservas Serrats con los huevos de codorniz pinchados en dos brochetas junto a las aceitunas verdes.
Por último, colocamos una aceituna negra por ensalada, espolvoreamos perejil picado y colocamos una ramita de perejil entre las brochetas.